Es obvio que el término del lujo ha alterado y lo proseguirá haciendo, tendiendo poco a poco más a experiencias exclusivas y diferenciadoras que hagan que los turistas vivan instantes únicos.
Ya hay hoteles en los que dormir es lo de menos, mas me pregunto si en ciertos casos esta tendencia no nos conduce a la pura excentricidad de la que van a poder gozar solo unos pocos. Hete aquí unos ejemplos.
Ciertas ideas puestas en marcha en este sentido incluyen exactamente un planificador de experiencias a la medida, los servicios de un maestresala para dar sorpresas o bien hacer el equipaje, tratamientos de belleza con sabor a gin tonic, gozar de las experiencias en un hotel en el que la música es la genuina protagonista, un conserje exclusivo para la piscina o bien un afterwork mientras que se recibe una masterclass de arte de la mano de un especialista.
Ciertas de ellas deben ver con el omnipresente móvil en nuestras vidas y la necesidad de estar siempre y en toda circunstancia conectado, como la posibilidad de gozar de un community mánager al servicio del usuario a lo largo de su estancia, un Instagram Butler a fin de que nos recomiende cuáles son las fotografías más ideales para subir a esta red social; o bien por contra, la posibilidad de probar un programa de desintoxicación tecnológica de hasta una semana de duración.
Planificador de experiencias a la medida
Con el propósito de brindar a sus huéspedes experiencias únicas y de calidad a lo largo de su estancia, el hotel Barceló Bilbao Nervión ha creado el nuevo servicio de Group Activity Planner, con el que los conjuntos pueden contratar a una persona que se dedique únicamente a crear una agenda de actividades recreativas y entretenimiento para ellos, desarrollada a medida de su viaje, sus gustos y sus necesidades.
El hotel bilbaíno, popular destino de convenciones y acontecimientos corporativos, ha pensado en especial en sus clientes del servicio MICE para ofrecer este nuevo servicio que incluye propuestas desde un camino en bote por la ría de Nervión y una visita guiada al Museo Guggenheim, hasta una cena privada en ciertos mejores restaurants de la urbe.
El nuevo servicio está al cargo del Guest Experience Mánager, un nuevo cargo que se ha creado en la plantilla que tiene como misión cerciorarse de que la estancia de cada huésped sea única, cómoda y recordable.
Maestresala para dar sorpresas
Con el nuevo servicio de Message in a Butler del Barceló Illetas Albatros, sus clientes del servicio pueden seleccionar de una escogida carta la forma más original de asombrar a su acompañante, con la asistencia de un Experience Planner que actúa como cómplice y organizador de la sorpresa. Entre las opciones, desde una pedida de mano en el hotel hasta un camino en Vespa por Mallorca que acabe con un picnic frente al mar para poder ver atardecer.
El hotel asimismo dispone de un Holiday Social Mánager, especialista en redes sociales que acompaña a los huéspedes mientras que documenta sus vacaciones en sus instalaciones; y el Emoji Service, un servicio de atención al usuario mediante WhatsApp veinticuatro horas para contactar con el personal del hotel, pedir información, hacer reservas y solicitudes singulares, todo a través del móvil.
El nuevo lujo: no hacer el equipaje
Los clientes del servicio del Royal Hideaway Playacar, en la Riviera Maya, pueden hacer empleo del servicio de empaquetar sus posesiones completamente gratis, con el que un especialista en organización de maletas asiste a la habitación para poner sus prendas de forma inmejorable.
Sin salir del hotel, sus huéspedes asimismo pueden reservar el novedoso servicio de Instagram Butler, un maestresala de fotografía especialista en redes que no solo se hace cargo de dar consejos prácticos para cada fotografía, sino además de esto es el guía idóneo para encontrar los mejores escenarios donde tomar las imágenes.
Asimismo dispone de un servicio exclusivo de conserjería en sus 6 piscinas, que se encarga desde reservar una cama balinesa hasta aconsejar los mejores batidos naturales, pasando por pedir vez en el spa para un tratamiento hidratante.
Belleza con sabor a gin tonic
El Barceló Hamilton Menorca ha fusionado 2 de sus primordiales atractivos, coctelería y wellness, para crear el tratamiento Gin spa, honrando la larga tradición de la ginebra en la isla. El ritual se divide en un suave peeling anatómico y un masaje que se efectúa con productos aromatizados usados asimismo como complementos del gin tonic: pepino, cítricos, pétalos de rosa y frutos colorados. Además de esto, el paquete puede gozarse con un gin tonic o bien una de sus conocidas pomadas de cortesía, que se puede degustar contemplando el mar desde el Blue Sky Bar o bien en el bar Es Mirador.
Un hotel musical
Barceló Imagine, considerado el primer hotel musical de la capital de España, ofrece a sus huéspedes estancias tematizadas que empiezan desde el instante en que se ponen los pies en el lobby, donde se halla el icónico piano gigante de la película ‘Big’. Además de esto, cada una de sus plantas honra a diferentes géneros musicales, para ofrecer de esta manera a sus huéspedes experiencias únicas con la música como hilo conductor.
La temática musical asimismo llega como mucho alto, puesto que en su Sky Lounge, situado en la azotea del edificio, se puede gozar de noches musicales al cargo de DJ’s y de exclusivas music sessions. En verdad el pasado trece de julio, con ocasión de la celebración del Día del Rock, transformó uno de sus elevadores en el pequeño escenario de un concierto en el que cualquiera podía ser el protagonista, con micrófono, altífonos y hasta espectadores a su predisposición.
Un afterwork artístico
El Barceló Málaga plantea para los afterwork más creativos su programa de Art & Wine que, en el término B-Locals de Barceló Hotel Group (‘La fórmula de Barceló para transformar turistas en genuinos madrileños’), reúne una masterclass de arte con una cata de los vinos locales más novedosos de la mano del especialista Leo Peralta.
Desintoxicación tecnológica
Mas tras todo quizá el mayor lujo sea la desintoxicación tecnológica que plantea el Royal Hideaway Sancti Petri, una escapada de 3 a 7 días de duración en la que los huéspedes se olvidan de sus dispositivos para hacer un plan détox digital y renovarse psicológicamente con un programa de tratamientos adaptado.
En verdad, al hacer el check in los usuarios dejan sus teléfonos móviles, que quedan decomisados a lo largo de su estancia. El programa se completa con terapias para superar los efectos físicos de la exposición continuada a la tecnología y de las rutinas en el trabajo, como el exclusivo tratamiento iMass@ge en manos, muñecas, brazos y cervicales, que relaja a nivel muscular para eludir posibles contracturas y agarrotamientos; y con actividades deportivas y de meditación como el yoga.